Ramos Mexía vivió una jornada histórica con la jura de su nueva Carta Orgánica Municipal, pero el hecho quedó marcado por una decisión inédita: los representantes del Partido Justicialista decidieron no presentarse al acto y renunciar al juramento, dejando sin asumir al único concejal y al miembro del Tribunal de Cuentas pertenecientes a ese espacio.
La nueva Carta Orgánica fue elaborada por la Convención Constituyente elegida por voto popular, integrada por 11 representantes del oficialismo local —Todos por Ramos, encabezado por el intendente Nelson Quinteros— y 4 de la oposición.
Durante meses, ambos bloques trabajaron en la reforma de 22 artículos del texto original, con sesiones abiertas, actas firmadas y votaciones que en su mayoría se resolvieron por consenso.

Sin embargo, pese a haber participado de todo el proceso y acompañado buena parte de las modificaciones, el bloque opositor decidió no jurar el texto final. “Es una falta de respeto a la voluntad popular y a las instituciones del pueblo”, cuestionó la presidenta de la Convención, Claudia Suárez.
“Participaron, debatieron, votaron y firmaron las actas. No hay justificación para desconocer hoy lo que ellos mismos ayudaron a construir”, agregó.
Desde el oficialismo calificaron la actitud como un gesto de irresponsabilidad política. “El pueblo eligió a sus convencionales para que trabajen y cumplan con la ley. Decidir no jurar es darle la espalda a esa decisión democrática”, señaló Fabiana Licanqueo, convencional de Todos por Ramos.
El intendente Nelson Quinteros lamentó la postura del PJ y remarcó la trascendencia institucional del paso dado: “Esta reforma es fruto del trabajo de nuestra gente, de los convencionales que el pueblo eligió y que cumplieron con su mandato. Hoy Ramos Mexía tiene una Carta Orgánica moderna y democrática. Lo que no se puede permitir es que algunos dirigentes pretendan paralizar las instituciones por una decisión partidaria”.

La ausencia del concejal y del integrante del Tribunal de Cuentas pertenecientes al PJ abre ahora una instancia administrativa, ya que ambos debían prestar juramento obligatorio para continuar en funciones. El Ejecutivo Municipal adelantó que informará lo sucedido a la Junta Electoral Provincial, que será la encargada de definir los pasos a seguir conforme a la ley.
“Ramos Mexía dio un paso adelante en institucionalidad, en transparencia y en respeto a la democracia. Quienes decidieron no jurar eligieron quedar afuera de ese camino”, concluyó Quinteros.